lunes, 21 de abril de 2014

Elogios por Sugestión


Encontrábase una noche en casa de la condesa Browne, fanática admiradora de Beethoven, el discípulo predilecto de éste, Fernando Ries. El joven había tocado toda la noche composiciones de su famoso maestro, hasta que finalmente, se puso a improvisar una marcha. No resultó una mala composición, aunque, naturalmente, no tenía el valor de la maravillosa música del autor de "Claro de Luna".
Pero la dueña de casa, creyendo que también aquélla era una composición de Beethoven, la ponderó muchísimo, sin que Ries, el discípulo, la sacase del engaño. Y a la noche siguiente, en una nueva reunión que contó con la presencia del "Maestro", comenzó a elogiar su nueva composición.
Como es natural, éste se mostró extrañado, pero Ries se apresuró a explicarle, al oído, lo ocurrido, cosa que le divirtió muchísimo.
Quiso después que su discípulo tocara nuevamente aquella marcha; y al ser ejecutada, todos los presentes la ponderaron con los más elogiosos términos. Fue entonces que el gran compositor reveló el engaño, diciendo:
--Observe, Ries, cómo opinan sobre música estos famosos "entendidos". Cualquier composición es para ellos hermosa con tal que lleve el nombre de uno de sus autores predilectos.



Anecdotario Universal
César H. Cabrera

No hay comentarios.:

Publicar un comentario