jueves, 31 de julio de 2014

Odiado pero Afortunado


En 1947 Agustín Lara fue demandado por plagio. El escandalito de la canción “María Bonita”, que resultó tener la música de una vieja canción ranchera de Chucho Monge, “El Remero”, tan evidenciado no el plagio, que no lo hubo deliberado, pero sí el error de suponer original una melodía que le vino a la cabeza de la bruma lejana del pasado; y todo quedó en un arreglo mediante el cual Chucho Monge cobra, desde entonces, la mitad de las regalías que el elogio musical a María Félix sigue dejando hasta la fecha.
Antes de que Lara reconociera los derechos de Monge, un periodista le preguntó:
--¿Es cierto, señor Lara, que usted plagió una canción del señor don Jesús Monge?
Ante la pregunta directamente hecha, Agustín no flaqueó, pero sí echó para atrás la fina cabeza para dibujar una sonrisa triste. Contestó con su voz mil veces imitada:
--Señor: Usted puede ver mi casa. Es la casa más bonita de México. Usted conoce mis canciones; son las canciones más bonitas de México. No puedo presentarle en este momento a mi nueva esposa, porque está filmando, pero puedo asegurarle que María es la mujer más bonita de México. Naturalmente se me odia, señor, se me odia…

Memorias de un Reportero (1965).
Roberto Blanco Moheno

jueves, 24 de julio de 2014

Los Dos Tragahumos


Sir Walter Raleigh realizó numerosos viajes a América del Norte y exploró la costa atlántica de la misma. Este navegante fundó la colonia de Virginia y llevó a su país muestras del tabaco que los indígenas fumaban en una pipa. Cierto día en que Raleigh estaba en Londres, su sirviente quedó aterrorizado al ver cómo salía humo de la nariz y de la boca de su señor, y, en medio de su pánico, no encontró mejor solución que arrojar un vaso de cerveza al rostro de sir Walter, para apagar el “fuego”.

Dime Quién Es (1971).
Simone y Georges Monlaü

Político Botánico


En 1946, Miguel Alemán fue el candidato a la presidencia por el PRI y el 7 de julio de ese año tuvieron lugar los comicios. El presidente en ese momento, general Manuel Ávila Camacho, se ufanó de la limpieza de las elecciones, pero desde el primer momento los partidos de la oposición alegaron fraudes electorales.
El gobernador del Estado de San Luis Potosí, Gonzalo N. Santos, dejó votar en paz a la gente, pero en la noche envió a sustraer algunas urnas que eran custodiadas por el ejército. El teniente encargado de la guardia se negó rotundamente a permitir la salida de las urnas y Santos tuvo que llamar al jefe de zona militar, quien le explicó que por órdenes estrictas del presidente Ávila Camacho no podía permitir nada de eso, y que el oficial a cargo de la custodia era a prueba de cualquier soborno. Santos recomendó entonces que enviasen, con felicitaciones, a ese oficial fuera de allí y que en su lugar se quedara alguien “de verdadera confianza”. Así se hizo, y Santos pudo sacar no una, sino todas las urnas. Antes, claro, se había cuidado de cambiar las originales por otras que él mandó hacer y que tenían tornillos en las tapas. De esa manera abrieron las ánforas y arreglaron la “votación” como se les dio la gana.
Más tarde, todo mundo se enteró de la sustracción de las urnas y preguntaron a Santos si eso no era inmoral. “En política y en el juego”, sentenció Santos, “la moral es un árbol que da moras”.

Tragicomedia Mexicana 1 (1990).
José Agustín

domingo, 20 de julio de 2014

Hombre Prevenido


El rey Luis XIV, el Rey Sol, hablaba un día del poder del monarca sobre sus vasallos y Armand  de Gramont, conde de Guiche, se permitió observarle que tal poder tenía sus límites.
--Conde --le dijo el rey--, mi poder no tiene límites. Si yo os mandara tiraros al mar tendríais que arrojaros de cabeza al agua inmediatamente.
El conde no replicó, pero dando media vuelta se dirigió a la salida del salón.
--¿Dónde vais? -le preguntó el rey.
--A aprender a nadar, señor.
Todos rieron.

Revista en Red
José Luis Carranco

sábado, 19 de julio de 2014

Arquitecto Mal Pagado


La leyenda cuenta que en 1555, Iván el Terrible ordenó la construcción de la Iglesia de San Basilio en Moscú. Estaba tan complacido con esta obra del arquitecto Póstnik Yákovlev, que mandó dejarle ciego para que nunca pudiera proyectar nada más hermoso.

El Libro de los Sucesos (1979).
Isaac Asimov

Dando una Mano de Pintor


En alguna ocasión que José Luis Cuevas enfermó gravemente dijo a la prensa: “Este será el año de mi muerte”. Entonces el retratista José Luis Pasajes lo llamó por teléfono diciéndole que siempre había querido dibujar a una persona enferma en todo el proceso de su gravedad, hasta llegar a la muerte.
            Cuevas se sintió algo molesto y le dijo:
--Mire usted, tengo la exclusividad de mis propios retratos.
Pero Pasajes con ingenuidad macabra le respondió:
--Entienda, Cuevas, que llegará un momento en que ya no podrá sostener una pluma o un lápiz, y ahí estará Pasajes para sustituirlo.
La respuesta le hizo gracia a Cuevas y aceptó retratarse.
Por cierto, José Luis Cuevas, involuntariamente defraudó a Pasajes pues no murió como lo había pronosticado.

Confesiones de José Luis Cuevas (1975).
Alaíde Foppa

viernes, 18 de julio de 2014

El Peor del Grupo


Charles Chaplin, una vez participó de incógnito en un concurso de imitadores de “Charlot”. Sin embargo, no pasó de la primera ronda, los jueces le dieron una de las peores calificaciones como imitador de sí mismo.

Revista en Red
José Luis Carranco

Futbol vs Borges


Una revista de actualidad reúne a Jorge Luis Borges con el director técnico César Luis Menotti. "Qué raro, ¿no? Un hombre inteligente y se empeña en hablar de fútbol todo el tiempo", comenta Borges más tarde.

Jorge Luis Borges, Anecdotario (2008).
Amalia Ugo de Ruiz Díaz

lunes, 14 de julio de 2014

Las Tres Preferencias


Christoph Willibald von Gluck, el ilustre compositor de la ópera Orfeo y Eurídice, adoraba el dinero y la buena comida, cosa de la que no se avergonzaba a la hora de contarlo.
En cierta ocasión alguien le preguntó:
—Maestro, ¿qué es lo que prefiere en el mundo?
—Tres cosas: el dinero, el vino y la gloria.
— ¿Cómo? Para usted, un músico, ¿la gloria viene después del dinero y del vino? No es congruente…
—Pues es bien sencillo. Con el dinero compro vino, el vino despierta mi genio y éste me trae la gloria.

20minutos.es
Alfred López

Magna Respuesta

             
Alejandro Magno sentía admiración por el  filósofo Diógenes y fue a visitarlo, le preguntó si tenía algún deseo que él pudiese complacer. El sabio le respondió afirmativamente: “Desearía que te apartaras y no me quitaras el sol”.

Dime Quién Es (1971).
Simone y Georges Monlaü

miércoles, 9 de julio de 2014

Da Consejos y se Queda Sin Ellos


Al Gore, ex vicepresidente de Estados Unidos, ganador de un Oscar por su documental sobre el calentamiento global en el que promueve el ahorro de energía, parece no aplicar sus propias recomendaciones. El consumo en su residencia de 20 habitaciones en Nashville fue de $30,000 dólares durante 2006, 12 veces más que una familia americana en promedio.

Sabiasque.info (2011).
Francisco Huelsz

lunes, 7 de julio de 2014

El Otelo Pirata

             
En el Teatro Nacional debuta el 13 de septiembre de 1887 la compañía de ópera traída por el empresario Napoleón Sieni, quien había asegurado al público que daría a conocer la más reciente producción de Giuseppe Verdi, el Otelo, estrenada en Milán ese mismo año y aún no cantada en París. Al pedir a la Casa Ricordi, de Italia, la instrumentación, el empresario recibió como contestación que no era posible vender los derechos de esa ópera a ningún país mientras no se estrenase en Francia; condición absurda, puesto que Otelo no se estrenó en París sino hasta siete años después. Esta noticia enojó a Sieni y se dirigió a un músico amigo suyo que vivía en Milán pidiéndole que asistiese a una, o a varias, de las funciones del Otelo y copiara la música instrumentándola luego como él quisiese. Con la carta iba también la promesa de una buena suma si hacía lo pedido. El maestro italiano no lo pensó dos veces: fue al Teatro de la Scala y, papel pautado en mano, copió nota a nota la ópera íntegra, la instrumentó a su placer y la envió a México. De ese modo, con una instrumentación apócrifa, se estrenó en México, antes que en ninguna otra parte del mundo a excepción de Italia, el Otelo, de Giuseppe Verdi. No nos explicamos porqué la Casa Ricordi no demandó a los empresarios que tuvieron tal osadía, o quizá nunca se enteró de robo tan descarado.

Cien Años de Teatro en México (1972).
Luis Reyes de la Maza

domingo, 6 de julio de 2014

Ojos Que No Ven...



Durante su recorrido por las provincias rusas en 1787, Catalina II la Grande creyó, al ver gente alegre y villorrios prósperos, que había conseguido hacer dichosos a sus súbditos. No se dio cuenta que todo era un engaño fraguado por su primer ministro, el tuerto Grigori Potemkin, quien hizo disponer «aldeas Potemkin» a lo largo de la ruta real. Había ordenado al pueblo que aseara las calles, pintase las fachadas de sus casas, vistiera sus mejores ropas y sonriera. La emperatriz jamás notó la miseria y mugre tras esas fachadas.

El Libro de los Sucesos (1979).
Isaac Asimov

miércoles, 2 de julio de 2014

Epitafio


Conviene recordar esa tumba que está en el cementerio del Congreso de Washington de un militar llamado Leonard Matlovich, condecorado por sus servicios en Vietnam y que se pasó los últimos años de su vida proclamando su homosexualidad. Su epitafio lo resume todo: «Cuando estaba en el ejército, me dieron una medalla por matar a dos hombres y me echaron por amar a uno».

Se Armó la de San Quintín (2012).
Nieves Concostrina